Detalles
Raciones
6 personas
Tiempo
30 minutos
Esta tarta de limón es casi mágica, se hace súper rápido y el resultado es maravilloso. Tiene un sabor muy fresco y suave, es ideal para terminar la comida con buen sabor de boca.
Ingredientes
370 g de leche condensada
200 ml de nata para montar
200 ml de leche
300 g de queso crema
175 ml de zumo de limón (4 limones aprox)
175 g de galletas maría
- MOLDE
Molde desmontable de 19 cm de diámetro
Pasos
- Vamos a utilizar el borde de un molde desmontable de 19 centímetros de diámetro más o menos. Colocamos el borde del molde, sin la base, en el plato en el que vamos a servir la tarta y lo cubrimos con papel de horno. Podemos untar el molde con un poco de mantequilla para ayudar a que se pegue mejor el papel de horno.
- En un cuenco echamos la leche condensada, la nata, la leche y el queso. Batemos a mano con unas varillas hasta que nos quede una mezcla homogénea. Tendremos una crema líquida por el momento.
- Cortamos uno de los limones por la mitad y cortamos 2 rodajas finitas. Las partimos a la mitad y la colocamos por dentro en el borde del molde para decorar. A continuación exprimimos los limones hasta obtener 175 ml de zumo.
- Cuando tengamos el zumo preparado, vamos a ir añadiéndolo poco a poco a la mezcla de nata y leche mientras batimso con las varillas. Observaremos como empieza a espesar hasta tener una crema más densa. Integramos todo bien y reservamos.
- Después echamos en el plato dentro del molde la primera capa de crema, y luego la primera de galletas. Si nos quedan huecos sin cubrir podemos partir las galletas para intentar cubrir la máxima superficie de crema. Repetimos el proceso hasta tener 4 o 5 capas de galletas y extendemos bien la ultima capa de crema.
- Dejamos reposar en la nevera unas 5 o 6 horas hasta que se solidifique y antes de servir, desmoldamos y rallamos un poco de limón por encima. También podemos decorar con rodajas de limón o unas hojitas de menta.